“Si quieres que algo salga bien, hazlo tú mismo”, esta frase, que hemos escuchado en tantas ocasiones, cobra sentido al momento de reparar las averías de tu automóvil. Si bien, no todos pueden ser mecánicos profesionales, pero es realmente importante conocer sobre mecánica básica para solucionar algunos percances que se podrían presentar de manera inesperada; es por ello que te invitamos a leer estos consejos y ponerlos en práctica.
Leer el manual de uso: pocos conductores se acostumbran a hacerlo, pero es realmente importante revisar el manual de tu automóvil, pues dentro de él hay especificaciones y consejos para cuidar y aprovechar tu vehículo al máximo.
Revisar los amortiguadores: su función principal es fijar correctamente las ruedas con la carretera. De ellos depende el frenado del auto, por eso es primordial asegurarse de que todo esté en orden con estas piezas. Para cerciorarse de su correcta función, solo basta dejar caer el peso de tu cuerpo sobre el capirote o capó de tu vehículo, para luego incorporarte; si notas un movimiento inusual es porque debes cambiarlos.
Cambiar las llantas: principalmente debes fijarte de su estado general; si encuentras alguna anomalía como abolladura o pinchadura, te recomendamos cambiarla.
¿Cómo cambiar una llanta?
- Estaciona el auto en un lugar seguro y coloca el freno de mano; luego, utilizando la llave de cruz, libera la presión de los birlos pero todavía no los retires; posteriormente debes poner el gato hidráulico cerca de la llanta dañada y después levanta tu vehículo, pero ¡ojo!, el gato se coloca debajo del chasis, no de la carrocería; acto seguido, retira los birlos y quita la llanta dañada, para luego poner la refacción; por último, coloca lo birlos nuevamente y apriétalos con la llave de cruz, para luego bajar el auto y continuar tu camino.
Verifica el nivel de los líquidos: levanta el capó o capirote e identifica los cilindros en donde se rellena el líquido de frenos, combustible, aceite, agua para el parabrisas, el radiador o anticongelante. Todos ellos tienen marcas que señalan el nivel que deben contener para funcionar de forma correcta; generalmente es un poco más de la mitad.
Interpreta el tablero: como consejo básico para un conductor es esencial conocer los testigos de su auto y su significado, así como los colores de prevención para cada uno de ellos. Esto te ayudará para evitar un posible percance al momento de conducir.
Verifica el encendido de las luces: antes de conducir es importante que revises el adecuado funcionamiento de las luces delanteras y traseras: direccionales, frenos, luces bajas o altas, luces antiniebla. Si es necesario, limpia los faros para que se ilumine mejor tu ruta.
Pon atención en tus espejos: fíjate en que estén limpios, sin daño alguno y que se puedan mover correctamente para adaptarlos en la posición que requieres.
Después de seguir estos tips de mecánica básica, te aseguramos que te sentirás más seguro al momento de conducir, pues estarás alerta por si alguna anomalía se pudiese presentar. El saber actuar de forma responsable con los cuidados que requiere tu auto te llevará lejos.
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